dc.description.abstract | La entomología forense es la disciplina que estudia a los insectos y otros artrópodos
que acuden a los cadáveres y que aportan información útil en investigaciones policiales
y judiciales, siendo la contribución más importante la estimación del intervalo
postmortem, el cual se basa en la tasa de desarrollo de determinada especie de insecto
(sobre todo díptero) y en los patrones de sucesión de insectos sarcosaprófagos en un
cuerpo en descomposición. Al existir objeciones éticas y morales al uso de cadáveres
humanos como modelos de estudios para el conocimiento de dichos insectos, se hace
inevitable el empleo de animales que permitan determinar la composición de insectos;
siendo el cerdo doméstico, el animal que presenta más semejanzas en el proceso de
putrefacción con respecto a lo que sucede en humanos. Con el objetivo de estudiar los
mencionados patrones de sucesión en distintas épocas del año y su relación con los
procesos de descomposición cadavérica, de agosto a octubre de 2005 y de enero a
noviembre de 2006, se expuso a la intemperie el cadáver de dos cerdos, uno en cada
periodo. Se reconocieron cinco estados de descomposición (fresco, hinchado,
descomposición activa, descomposición avanzada y restos secos) cuya duración en
días fue mayor en el segundo cadáver. Se colectaron 8,922 ejemplares (entre larvas y
adultos), distribuidos en 4 órdenes, 14 familias, 33 géneros y 22 especies. Mediante un
análisis multivariado de correspondencias (Chi-cuadrada P <0.0001, = 0.05) se
establecieron las relaciones que guardan las especies sarcosaprófagas con los estados
de descomposición; con base en esa información se construyeron matrices de
ocurrencia en donde se encontró que los dípteros Lucilia eximia, Calliphora latifrons,
Chrysomia rufifacies, Cochliomiya macellaria, Hydrotea hougui, Ophyra aenescens,
Piophila casei y Fannia canicularis pueden ser utilizados como indicadores en casos
forenses, al igual que los coleópteros Dermestes maculatus, Tanatophilus truncatus,
Omosita sp., Trox sp., Hister californicus, Saprinus lugenes, Geonysaprinus sp.,
Xerosaprinus sp. y el Himenóptero Labidus coecus. En el presente trabajo, se resalta la
importancia de L. eximia, ya que esta especie tuvo un papel determinante en la
descomposición cadavérica en el primer sujeto experimental, ya que fue la primera en
arribar y la que se mantuvo durante los periodos de descomposición fresco, hinchado y
avanzada en un numero considerable respecto a las demás especies. Este trabajo
resulta ser el primer reporte de un estudio de sucesión de entomofauna cadavérica en
el Estado de México usando como biomodelo Sus scrofa, lo que pretende fomentar los
trabajos relacionados con la entomología forense y su uso en la procuración de justicia
en la entidad.______Forensic entomology is the discipline that studies insects and other arthropods which
converge on corpses, and supply useful information in police and judicial investigations.
The most important information supplied is an estimation of the postmortem interval,
which is based on the development rate of a determined insect species (especially
dipterous insects), and on the succession patterns of sarcosaprophagous insects in a
decomposing body. There being ethical and moral objections to the use of human
corpses as study models to know the behavior of the mentioned insects, the need rises
to find an animal on which to study that will allow to determine insect composition. The
domestic pig is the best suited for this purpose since it shows the greatest likeness in
the decomposing process to the human body. In order to study the mentioned
succession patterns during different times of the year and their relationship with the
processes of corpse decomposition, the carcasses of two domestic pigs were left in the
open air, one from August to October, 2005, and the other from January to November,
2006. Five stages of decomposition were established (fresh, bloated, active
decomposition, advanced decomposition, and dry remains) whose duration in days was
longer in the second carcass. We collected 8,922 animals (larvae and adults), made up
of 4 orders, 14 families, 33 genera, and 22 species. Through a multivaried
correspondence analysis (Chi-square P<0.0001, a=0.05) the relationships between the
sarcosaprophagous species and the stages of decomposition were established. Based
on this information, occurrence matrixes were built where the dipterous Lucilia eximia,
Calliphora latifrons, Chrysomia rufifacies, Cochliomiya macellaria, Hydrotea hougui,
Ophyra aenescens, Piophila casei, and Fannia canicularis were found to be useful as
indicators in forensic cases, as well as the coleopterans Dermestes maculatus,
Tanatophilus truncatus, Omosita sp., Trox sp., Hister californicus, Saprinus lugenes,
Geonysaprinus sp., Xerosaprinus sp., and the hymenopter Labidus coecus. The
importance of L. eximia is highlighted in this work since this species played a
determining role in the decomposition of the carcass of the first experimental subject. It
was the first one to arrive at the carcass, and the one which remained during the fresh,
bloated, and advanced stages of decomposition in a considerable nuber with regard to
the other species. This work is the first of its kind to report a study of the succession of
sarcosaprophagous fauna in the State of Mexico using Sus scrofa as a biomodel, and it
aims to encourage other works related with forensic entomology and its use for legal
purposes in the state. | es |